sábado, 1 de septiembre de 2012

Tic tac

Entra. Azota la puerta. Sube las escaleras y su prisa me advierte el desastre. Se detiene frente a mi. "Te amo" dice.

Ah, no, "adiós" dice. "Ya no te quiero. Necesito aire".

O lo dije yo...

"Te quiero pero ya no te amo".

Ahora se que lo amaba tanto que ya era momento de irme.